El uso del láser en fisioterapia, conocido como terapia láser de baja intensidad (TLBI) o fototerapia, se ha vuelto cada vez más popular por sus beneficios en la rehabilitación y el tratamiento del dolor. Aquí hay algunos puntos clave sobre su aplicación:
Beneficios del láser en fisioterapia:
- Alivio del dolor: El láser puede ayudar a reducir el dolor agudo y crónico, mejorando la circulación sanguínea y promoviendo la liberación de endorfinas
- Reducción de la inflamación: Ayuda a disminuir la inflamación en tejidos dañados, lo que puede acelerar la recuperación.
- Aceleración de la cicatrización: Estimula la regeneración celular y mejora la síntesis de colágeno, facilitando la recuperación de lesiones.
- Mejora de la movilidad: Al reducir el dolor y la inflamación, puede ayudar a restaurar la función y la movilidad en las articulaciones afectadas.
Aplicaciones comunes:
- Lesiones musculares y articulares
- Tendinitis y bursitis
- Lesiones deportivas
- Dolor neuropático
- Cicatrices y heridas
Consideraciones:
- Duración y frecuencia del tratamiento: Los protocolos pueden variar dependiendo de la condición a tratar y la respuesta del paciente.
- Contraindicaciones: No se recomienda en ciertas condiciones, como en el caso de tumores malignos, infecciones agudas o en áreas donde haya dispositivos electrónicos implantados.
Siempre es importante que el tratamiento con láser sea administrado por un fisioterapeuta capacitado, quien evaluará la situación particular de cada paciente.